La ex tenista mexicana Rosa María Pajarita Reyes falleció la madrugada de ayer en su casa de la Ciudad de México, a los 84 años de edad, víctima de un problema pulmonar.
Reyes Delgado, quien forjó una historia de éxito en el deporte blanco nacional, formó parte de una generación dorada a la que también pertenecieron Yolanda Ramírez, Rafael Osuna y Joaquín Loyo Mayo, entre otros.
La jugadora cosechó múltiples logros internacionales, como la corona de dobles en el Abierto de Francia en 1958, junto con Ramírez, con quien además registró otras dos finales en el mismo torneo de Roland Garros en 1957 y 1959. En la modalidad de dobles mixtos, fue finalista con su compatriota Marcelo Lara en 1974.
Reyes comenzó a practicar tenis desde muy niña gracias a la influencia de su padre, Esteban, Pajarito Reyes, primer mexicano en conseguir un punto Copa Davis en una serie ante Estados Unidos en 1935. El jugador, considerado uno de los íconos del deporte blanco del país, falleció en 2014 a los 100 años.
Su innato talento con la raqueta la llevó a las semifinales en singles del Abierto de Francia, en 1959; además fue cuartofinalista individual en Wimbledon 1957 y en 1959 llegó a tercera ronda de dobles mixtos, con su esposo, el también tenista francés Pierre Darmon.