Después del motín de Wagner, Rusia en estos momentos enfrenta las consecuencias de tal rebelión armada entre informaciones contradictorias sobre el supuesto arresto del vicejefe de las tropas rusas en Ucrania, mientras tanto Kiev aprovecha el caos reinante en el país vecino para avanzar en el este y sureste.
Serguéi Surovikin, uno de los pocos mandos militares rusos alabados por el jefe del Grupo Wagner, Yevgueni Prigozhin, ha desaparecido del espacio público desde el sábado pasado, lo que generó sospechas sobre una posible purga en las filas de las Fuerzas Armadas rusas.