Justicia de EE.UU. reduce sentencia a los hermanos Menéndez; podrían obtener libertad condicional tras tres décadas en prisión.

Un juez de California modificó las sentencias de Erik y Lyle Menéndez, condenados en 1996 por el asesinato de sus padres, abriendo la posibilidad de que obtengan libertad condicional tras más de 30 años en prisión.
El juez Michael Jesic, del Tribunal Superior del condado de Los Ángeles, redujo la cadena perpetua sin libertad condicional a una sentencia de 50 años a cadena perpetua. Esta decisión permite que los hermanos sean elegibles para libertad condicional bajo la ley de delincuentes juveniles del estado, ya que cometieron los crímenes antes de los 26 años.
La Junta de Libertad Condicional de California deberá ahora evaluar si concede su liberación.
Durante la audiencia, los hermanos comparecieron mediante videollamada desde la prisión de San Diego. Lyle Menéndez, de 57 años, declaró:
“Maté a mi mamá y a mi papá. No tengo excusas. Asumo toda la responsabilidad”.
Por su parte, Erik Menéndez, de 54 años, expresó:
“Disparé cinco veces a mis padres y fui por más munición. Le mentí a la policía y a mi familia. Lo siento mucho”.
Varios familiares intervinieron en la audiencia apoyando su liberación, asegurando que han cambiado profundamente en prisión.
“Creemos que 35 años son suficientes”, dijo Anamaria Baralt, prima de los hermanos. “Nuestra familia los ha perdonado universalmente. Ellos merecen una segunda oportunidad”.
Diane Hernández, sobrina de Kitty Menéndez, los describió como “seres humanos extraordinarios” y afirmó que “no hay posibilidad alguna de que vuelvan a infringir la ley”.
Los hermanos Menéndez fueron hallados culpables de asesinar a sus padres, José y Kitty Menéndez, el 20 de agosto de 1989, en su mansión de Beverly Hills, mientras veían televisión. Inicialmente alegaron que se trataba de un ataque de la mafia, pero Erik confesó el crimen a su terapeuta, lo que derivó en su arresto.
La defensa sostuvo que actuaron tras sufrir años de abuso sexual y psicológico por parte de su padre, pero la fiscalía argumentó que el móvil fue la ambición por la herencia millonaria.
El caso generó gran interés mediático y ha vuelto al foco público por nuevas producciones como “Monsters: The Lyle and Erik Menendez Story” en Netflix y el documental “The Menendez Brothers”.
Aunque el anterior fiscal del distrito, George Gascón, apoyó la revisión de la sentencia, el actual fiscal, Nathan Hochman, se ha manifestado en contra de cualquier conmutación.