Ante una catedral a toda su capacidad, el obispo de la Diócesis de Aguascalientes, Juan Espinoza Jiménez, presidió su primera Santa Misa Crismal como obispo en el estado.
Durante esta celebración eucarística, donde también se realizó la renovación de las promesas sacerdotales, el obispo llamó a los padres presentes y a los creyentes a reflexionar y los exhortó a aprovechar el hoy de nuestra iglesia para descubrir juntos el camino a seguir.
Al finalizar la misa, el obispo entregó los Santos Óleos y el Santo Crisma a los representantes de cada una de las parroquias de la Diócesis.