El 29 de marzo de 2025, diversas ciudades alemanas fueron escenario de protestas contra Tesla, como parte de un “día de acción global” organizado por el movimiento Tesla Takedown. Las manifestaciones, aunque de bajo impacto, incluyeron acciones en Berlín, Múnich, Núremberg y otras ciudades, que se sumaron a un movimiento internacional dirigido contra el multimillonario Elon Musk y su compañía.
El incidente más destacado ocurrió en Ottersberg, donde siete vehículos eléctricos Tesla fueron completamente destruidos por un incendio en un concesionario local durante la madrugada. Aunque el vandalismo no parece haber sido parte de una acción generalizada, este acto fue el preludio de las protestas programadas a lo largo del día.
En Berlín, un grupo de aproximadamente diez personas se congregó frente a una tienda de Tesla en el distrito de Reinickendorf, donde desplegaron una pancarta con el mensaje “Cierren el grifo a Tesla”. Además, en el centro comercial de Berlín-Mitte, varios manifestantes abrieron paraguas naranjas dentro de la sala de exposición de Tesla y se tumbaron en el suelo, en una clara manifestación de desobediencia pacífica.
Acciones similares también se llevaron a cabo en Múnich, Núremberg y otras ciudades alemanas, y en varios países del mundo como parte del llamado global del movimiento Tesla Takedown.