Personas pensionadas que trabajan como repartidores o conductores a través de plataformas digitales han expresado su preocupación por los posibles efectos de la reforma laboral que busca formalizar a este sector. La iniciativa implica que los trabajadores sean dados de alta nuevamente en el régimen obligatorio del Seguro Social, lo que podría obligarlos a regresar a un empleo asalariado y perder sus pensiones.
Trabajadores y abogados advirtieron que quienes están bajo el régimen de la Modalidad 40, en el que siguen aportando al Seguro Social de manera independiente para mejorar su pensión, se enfrentarían a un dilema: continuar trabajando en plataformas y perder la pensión o dejar de hacerlo para conservar sus derechos. Miriam Salazar, una conductora de 59 años, indicó que su pensión se ve beneficiada por sus aportaciones, pero temen que la reforma cambie las reglas y afecte sus ingresos y beneficios.
El abogado laboral Diego García Saucedo explicó que la reforma podría forzar a los pensionados a elegir entre perder su pensión o dejar de trabajar en plataformas. En particular, los trabajadores que cotizan bajo la Modalidad 40, en la que los empleados no están en el régimen obligatorio, podrían ver comprometidas sus aportaciones si se reinscriben en el sistema. La situación ha generado incertidumbre entre los trabajadores, quienes piden a las autoridades y legisladores que aclaren el impacto de la reforma antes de su envío a la Cámara de Diputados.