La Organización Mundial de la Salud (OMS) lamentó la decisión de Estados Unidos de retirarse de la agencia, resaltando su rol crucial en la protección de la salud global, incluidos los estadounidenses. Aunque expresó esperanza de que EE. UU. reconsidere, el portavoz de la OMS, Tark Jasarevic, señaló que la retirada será efectiva en un año. Recordó que Estados Unidos fue uno de los fundadores de la OMS y su colaboración ha sido vital en las últimas siete décadas.
El presidente Donald Trump ordenó, en su primer día de mandato, pausar futuras transferencias de fondos a la OMS, acusando a la organización de estar influenciada por China durante la pandemia de COVID-19. La Unión Europea expresó su preocupación, destacando la necesidad de cooperación global en salud.
Mientras tanto, con el alto al fuego en Gaza en vigor, la OMS trabaja en un plan de 60 días para restaurar y expandir los servicios sanitarios en la Franja. El conflicto ha dejado hospitales destruidos y la mitad de los centros de salud operativos. La OMS también subrayó la importancia de apoyar a los trabajadores sanitarios y de maximizar la ayuda en la región, donde la situación humanitaria es crítica.