Miles de desesperados pobladores de Gaza han irrumpido en almacenes de ayuda para conseguir harina y otros productos básicos, en lo que la ONU ha llamado un signo preocupante de que el orden civil se está resquebrajando en la franja.
Imágenes de video de Khan Younis, en el sur de Gaza, muestran personas que salían ayer de un almacén cargando cajas y bolsas grandes con harina, artículos higiénicos y otros productos.
La Agencia de Alivio y Obras de Naciones Unidas para refugiados palestinos (UNRWA, por sus siglas en inglés) señaló que la gente en Gaza está asustada, frustrada y de-sesperada después de tres semanas de bombardeo implacable y estado de sitio en el enclave.
Las tensiones y el miedo empeoran por el corte en las líneas de comunicación telefónica y de internet, expresó el director de la UNRWA en Gaza, Tomas White. La gente se siente abandonada a su suerte, aislada de sus familias dentro de Gaza y en el resto del mundo.
La ONU ha dicho que se requiere más ayuda con urgencia, mencionando hambre, enfermedades transmitidas por el agua y deshidratación. Las necesidades de las comunidades son inmensas, aunque sea sólo para supervivencia básica, mientras la ayuda que recibimos es magra e inconsistente, agregó White.
Juliette Toma, vocera de la UNRWA, la cual ha perdido 59 trabajadores en el bombardeo, declaró a The Independent que los almacenes asaltados se ubican en el centro y el sur de Gaza, en zonas donde Israel ha ordenado la evacuación de civiles.