Un grupo de migrantes de Centro y Sudamérica que atraviesan Puebla ha hecho un llamado a la próxima presidenta, Claudia Sheinbaum, para que modifique las condiciones de trato de los elementos del Instituto Nacional de Migración (INM) y les permita un libre tránsito hacia Estados Unidos. Estos migrantes, provenientes de países como Ecuador, Venezuela, y Honduras, han caminado durante dos meses en busca de un futuro mejor para ellos y sus familias.
Durante su travesía, las intensas lluvias han complicado su camino, obligándolos a refugiarse en una bodega abandonada para descansar. A pesar de su esfuerzo, han enfrentado obstáculos por parte de las autoridades migratorias que no les permiten avanzar. Michelle Soares, una migrante venezolana, relató su dolorosa historia, señalando que dejó su hogar tras la muerte de su esposa, buscando un futuro digno para su hijo de cinco años.
Los migrantes enfatizan que no buscan causar disturbios, sino apoyo y comprensión. “Todos somos migrantes”, afirmó Soares, pidiendo un trato más humano por parte de las autoridades. Su deseo es cruzar México sin problemas para llegar a EE.UU., donde esperan enviar recursos a sus familias.
Por su parte, Mister Lea, un migrante hondureño, confía en que la sensibilidad de Sheinbaum, al ser mujer y provenir de una familia humilde, podría ayudar a mejorar la situación de quienes buscan una mejor calidad de vida. “Lo único que queremos es pasar y ayudar a nuestras familias”, concluyó, expresando la esperanza de que su mensaje sea escuchado.
