Integrantes del colectivo Memoria, Verdad y Justicia de Acapulco acusaron desorganización y falta de seguridad por parte de las autoridades en la búsqueda de personas desaparecidas en la entidad. Durante una jornada de rastreo en La Poza y El Coloso, denunciaron la falta de coordinación entre la Comisión Estatal de Búsqueda y la Fiscalía General del Estado.
Socorro Gil Guzmán, presidenta del colectivo y madre de un joven desaparecido en 2018, lamentó que las autoridades no brinden las condiciones necesarias para las brigadas. Relató que el martes, las buscadoras fueron trasladadas en la parte trasera de una patrulla sin las mínimas condiciones de seguridad, mientras que el miércoles no contaron con resguardo de la Guardia Nacional.
Las activistas advirtieron que el problema de los cementerios clandestinos en Acapulco es previo al reciente hallazgo en el rancho Izaguirre, en Jalisco, y que más fosas podrían encontrarse en Guerrero. “Hay fosas en Iguala, Chilpancingo, Acapulco. Esto no es nuevo, pero ahora parece que hay más atención”, afirmó Nadia Romero Gil, hermana de un desaparecido.
Las madres buscadoras exigieron mayor compromiso de las autoridades, señalando que muchas familias llevan años esperando una búsqueda sin respuesta. También retomaron la colocación de fotografías de sus familiares en el quiosco del zócalo de Acapulco, luego de que su material fuera retirado en enero por considerarse una “mala imagen” para los turistas.