La carrera presidencial en Estados Unidos continúa extremadamente reñida después de las recientes convenciones partidarias. La candidata demócrata Kamala Harris y su compañero de fórmula, Tim Walz, comenzarán esta semana una gira en autobús por Georgia, mientras que los republicanos Donald Trump y J.D. Vance realizarán múltiples eventos en Pensilvania y Michigan, estados considerados clave para el resultado de la elección.
Las encuestas muestran una contienda cerrada, con Harris liderando a nivel nacional por solo 3 puntos. Sin embargo, en la práctica, la elección se decidirá en unos pocos estados clave, incluyendo Pensilvania, Michigan, Wisconsin, Georgia, Arizona, Nevada y posiblemente Carolina del Norte. Los resultados en estos estados son cruciales debido al sistema electoral que otorga todos los votos electorales de un estado al candidato ganador, independientemente del margen de victoria.
A pesar de que Harris hizo breves comentarios sobre la situación en Gaza durante la convención, su falta de un pronunciamiento contundente ha generado preocupación entre algunos delegados, especialmente en Michigan, donde una significativa comunidad árabe-estadounidense podría inclinar la balanza. Además, la gestión de la inmigración sigue siendo un tema polémico, con Trump criticando la administración actual por su manejo de la frontera, mientras que Harris enfrenta críticas por no abordar de manera más agresiva las políticas de inmigración en su campaña.
Las encuestas de NPR y CNN indican una ventaja mínima para Harris en estados clave como Michigan, Wisconsin y Pensilvania, pero las diferencias son tan ajustadas que se encuentran dentro del margen de error. La campaña de Harris enfrenta desafíos para consolidar su apoyo en estos estados disputados mientras continúa lidiando con la crítica de sus posiciones sobre inmigración y el conflicto en Gaza.