La revista Matter publicó un trabajo de investigadores japoneses que han creado un robot biohíbrido de dos patas combinando tejidos musculares y materiales artificiales.
El autómata de dos patas del equipo de investigación, un innovador diseño bípedo, se basa en el legado de los androides biohíbridos que aprovechan los músculos. Los tejidos musculares los han impulsado a gatear, nadar hacia adelante y hacer giros, pero no bruscos.
Sin embargo, poder girar y realizar rotaciones bruscas es una característica esencial para que los robots eviten obstáculos. Para construir un autómata más ágil con movimientos finos y delicados, los investigadores diseñaron un androide biohíbrido que imita la marcha humana y opera en el agua.
El robot tiene una parte superior de boya de espuma y patas con peso para ayudarlo a mantenerse erguido bajo el agua. El esqueleto del robot está hecho principalmente de caucho de silicona que puede doblarse y flexionarse para adaptarse a los movimientos de los músculos.