La frontera sur de México resiente la agudización del éxodo de Venezuela, tras un incremento de 131.8 por ciento de la migración irregular de ese país en 2023 hasta casi 223 mil personas, más de la cuarta parte del total de migrantes detectados por el Gobierno mexicano.
Venezuela fue el principal país de origen de los migrantes indocumentados que detectó en 2023 el Instituto Nacional de Migración (INM), que reportó una subida anual de más de 77 por ciento en la migración irregular al superar más de 782 mil personas.
Además, los venezolanos fueron la sexta nacionalidad con más solicitudes ante la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar), con cerca de 5 mil 500 peticiones el año pasado.
El arribo de venezolanos se ha sentido con particular fuerza en Tapachula, en la frontera de México con Centroamérica, donde el Centro de Dignificación Humana (CDH) advierte que la cifra de migrantes de ese origen podría haber superado los 300 mil, pues el Gobierno solo contabiliza los interceptados.
Luis Rey García Villagrán, director del CDH, indicó que la tendencia es creciente.
“En 2022, a pesar de una pequeña disminución (frente a 2021), aún así fue mucho mayor. Nosotros consideramos que un poco más de 260 mil migrantes de origen venezolano ingresaron (por la frontera sur) y ya en 2023 definitivamente el flujo aumentó”, detalló con base en estimaciones de la organización civil.
En la frontera sur, en Ciudad Hidalgo, se mantiene un campamento de entre 500 y mil venezolanos con casas de campaña en espera de recibir atención de las autoridades mexicanas.