Francia ha batido récords de máximas temperaturas para un final de verano por culpa de la inaudita ola de calor que ha traído aire del desierto del Sáhara y que se extiende prácticamente por todo el país, informó este miércoles Météo France.
Figuran entre las localidades que batieron récords en las últimas horas, la idílica ciudad de Annecy, cerca de la frontera suiza, que alcanzó los 31.6 grados; Saint-Brieuc, en plena región de Bretaña (noroeste), 31.3; y Chateau-Chinon, en la región central Bourgogne-Franche-Comté, 33.7.
También las mínimas en Francia han sido muy elevadas, equivalentes a noches tropicales. En Lyon, una de las principales ciudades del país, su aeropuerto internacional Saint-Exupery no bajó de los 22.3 grados por la noche.
Las temperaturas medias para esta época del año, a prácticamente dos semanas para el final del estío, han sido especialmente elevadas en París, con un mercurio más allá de los 30 grados durante más de cinco días, lo que ha disparado las acumulaciones de ozono en el aire superiores al techo de 180 µg/m³.
Météo France ya recordó que este verano meteorológico (junio, julio y agosto) ha sido el cuarto más caluroso desde comienzos del siglo XX, solo por detrás de los de 2003, 2018 y 2022.
Sobre esta excepcional ola, no se entrevé ningún verdadero refrescamiento al menos antes del domingo.