Uno de los problemas delicados en el Municipio de Jesús María es la falta de limpieza en las calles, y más aún, cuando llueve el problema está en los caimanes receptores de agua escurrida de las calles. Hay mucha basura porque se barren las avenidas una vez al mes. Los arroyos están afectados por la maleza crecida e impide el escurrimiento cuando llueve. Se han descuidado estos hábitos de la limpieza y los ciudadanos sufren cuando hay inundaciones durante lluvias intensas y los caimanes están tapados. Esto ocurre desde hace varios años.