El papa Francisco descansó bien por la noche y “mejora de forma progresiva” este jueves, tras ser hospitalizado el día de ayer miércoles por una infección respiratoria, indicó el Vaticano.
El pontífice de 86 años, al que se le extirpó parte de un pulmón en su juventud, desayunó, leyó los diarios y “trabajaba” desde su habitación del hospital Agostino Gemelli de Roma, según un comunicado del vocero Matteo Bruni.