Estudiantes internacionales enfrentan incertidumbre tras revocación de visas bajo el gobierno de Trump.

. La política migratoria impulsada por el expresidente Donald Trump continúa dejando huella en la vida de cientos de estudiantes internacionales que, tras perder su estatus legal en Estados Unidos, se vieron forzados a abandonar el país. Muchos de ellos aún enfrentan obstáculos para regresar, incluso después de que las autoridades estadounidenses revirtieran parcialmente algunas de las medidas más estrictas.
Uno de los casos más ilustrativos es el de un estudiante del sur de Asia, quien, tras ser expulsado de un laboratorio en Houston, regresó a su país de origen con un boleto de ida, temiendo ser detenido por el Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE). Aunque posteriormente la administración flexibilizó las medidas, el joven no ha podido regresar: su visa estadounidense fue revocada y no ha sido posible renovarla.
“Estoy varado”, expresó el estudiante en declaraciones bajo condición de anonimato, por temor a represalias.
La situación no es aislada. Decenas de estudiantes se encuentran en condiciones similares: imposibilitados de regresar a EE.UU., incapaces de reincorporarse a sus universidades o recuperar sus trabajos, e inmersos en procesos burocráticos inciertos para regularizar su estatus migratorio.
A pesar de los esfuerzos recientes del gobierno federal por restituir los registros estudiantiles afectados, la falta de garantías y el endurecimiento de los criterios por parte de ICE mantienen a muchos jóvenes en una situación de alta vulnerabilidad e inestabilidad emocional.
Expertos en educación y derechos migratorios han criticado las decisiones del anterior gobierno, advirtiendo que las restricciones impuestas a estudiantes internacionales afectaron gravemente la reputación académica y científica de Estados Unidos, además de disuadir a futuros talentos de considerar al país como un destino seguro para su formación.
Mientras tanto, el proceso de reconstrucción de vidas —para quienes se quedaron y para quienes fueron forzados a irse— sigue siendo lento y lleno de incertidumbre.