Día Internacional de las Remesas Familiares: importancia y situación actual en México.
Este 16 de junio se conmemora el Día Internacional de las Remesas Familiares, una fecha que reconoce el papel vital que tienen los migrantes al enviar recursos económicos a sus países de origen.
Impacto global: En la última década, las remesas han alcanzado los 5 billones de dólares a nivel mundial. Son un apoyo fundamental para millones de familias, financian educación, salud, vivienda y proyectos productivos.
Importancia en México: Representan cerca del 5% del consumo nacional y son la principal fuente de ingreso para millones, especialmente en zonas rurales y comunidades vulnerables.
Datos recientes:
El Banco de México (Banxico) publica información sobre las remesas recibidas en México:
En abril de 2025, las remesas en México cayeron un 12.1% anual, con ingresos por 4,761 millones de dólares.
Sin embargo, en noviembre de 2024 se registró un aumento del 10.6% anual con 5,435 millones de dólares.
De enero a noviembre de 2024, México recibió 59,518 millones de dólares en remesas, un aumento del 2.9% respecto al año anterior.
Se proyecta que para todo 2024, las remesas sumaron más de 65 mil millones de dólares.
Distribución regional en México:
El estado de Aguascalientes (1.1% de la población nacional) recibe el 1.5% del total de remesas.
La región conocida como el “Diamante de México”, con fuerte tradición migratoria hacia Estados Unidos, concentra el 35.23% del total de envíos.
En Aguascalientes, los municipios que más remesas recibieron en el segundo trimestre de 2024 fueron:
Aguascalientes: 153 millones de dólares
Calvillo: 36.5 millones
Rincón de Romos: 23.9 millones
Estos tres municipios suman el 84.3% del total de remesas recibidas en la entidad.
Proyección y relevancia futura:
Según Naciones Unidas, las remesas podrían superar en el futuro a la ayuda oficial para el desarrollo y la inversión extranjera directa, con un flujo estimado de 4.4 billones de dólares adicionales para 2030 hacia países de renta baja y media. Además, se promueven como una fuente estratégica para reducir la brecha de financiamiento del desarrollo sostenible, estimada en 4 billones de dólares anuales.