Es creador de 15 poemas. Es pepenador, y lamentablemente perdió el sentido de sus oídos por causa de las trompetas del tren al pasar junto a su casa.
Se trata de Carolino, un hombre de 90 años de edad, quien se dedica a pepenar en la basura, para ir a vender y de ahí comer.
Desde hace más de 30 años ha vivido en esta casa donde paga renta, ubicada junto a las vías del tren en el barrio de la Estación.
Dentro de su inspiración, ha escrito poesía, apegada a sus vivencias. Él lo denomina poesía callejera.
Hace unos años quedo soló con su perrito, tras la muerte de su mujer.
En las paredes de su casa esta dibujada la imagen de su matrimonio. Un artista peruano se encargó de plasmar su imagen para siempre.
Carolino, a pesar de escuchar muy poco y tener deficiencia visual, todos los días sale a la calle en busca de pepenar los contenedores para sacar cartón y basura reciclable, la cual lleva a vender y con eso poder comer junto a su perrito el Pinto.
En la letra de sus poesías lleva inscrito un mensaje a su querido fiel amigo inseparable, quien por más de 15 años no se le ha separado.
A su partida, quiere llevárselo para reunirse en el cielo con su mujer.