La espera terminó y para algunos una nueva vida comienza.
El Boeing 787-888 de la Fuerza Aérea Mexicana despegó ya de Bucarest, Rumania, cargado de (ahora sí con la cifra final y actualizada) 81 personas y una mascota, que salieron de Ucrania huyendo del terror que genera una guerra.
De lado quedan ahora el estruendo de las bombas que a algunos les hizo correr al búnker más cercano, al sótano de casa, a la estación del metro.
Con horas de camino en la espalda, lo que les tomó salir de un país en guerra, más otras tantas que tuvieron que seguir para llegar hasta la aeronave, este vuelo fue abordado por 73 personas de nacionalidad mexicana y/o familias mixtas, y 8 ciudadanos que su país de origen y destino final es otro.
Se trata de 44 que son de México: 23 hombres y 16 mujeres; 28 de Ucrania: 23 mujeres y 5 hombres; 7 ecuatorianos: 5 hombres y 2 mujeres; un hombre peruano y un hombre australiano.
En total, en el vuelo viajan 138 personas: 81 evacuados; 28 periodistas; seis funcionarios de la Secretaría de Relaciones Exteriores y 23 de la Secretaría de la Defensa Nacional.
Además, en el vuelo viaja Ramona, una perrita de raza conocida como salchicha, cuyo destino final es Chihuahua, México.