Impotencia y dolor, es el principal reflejo de decenas de familias, quienes vieron perder su hogar luego de la explosión de la pipa tras chocar con el tren en la colonia México. Únicamente les dicen esperar al peritaje y a la toma de decisiones tanto de las autoridades de justicia como gubernamental. En tanto, este día, pudieron llegar a su hogar a rescatar parte de sus pertenencias dentro de las propiedades quemadas. Para algunos de estos afectados lo más importante es el haber salvado su vida, y no haberla puesto en peligro. Y ahora solo 20 hogares se les considera como pérdidas totales, y la pregunta de sus habitantes, es a donde voy a irme a vivir, y como voy a volver a empezar mi negocio.
Estos interrogantes se encuentran sobre la mesa de discusión de quien será el responsable de pagarles los daños materiales. Aunque si bien, en algunos casos para fortuna, lograron salir a tiempo y no ocurrió una explosión mayor con los tanques de gas en los domicilios. ENTRA AUDIO