No es noticia que la situación en el país es complicada para todos. Antes se consideraba qué aquellos que estudiaban alguna carrera universitaria tendrían mejores oportunidades.
Desgraciadamente actualmente ni los profesionistas se salvan de los empleos mal pagados, tal es el caso de Abraham, que se vio obligado a poner un puesto de jugos y vender los mismos en los semáforos de primer anillo.
Abraham asegura que incluso le va mejor en los semáforos qué en su local, pues en tan solo 3 horas saca aproximadamente $600 pesos diarios.
Afortunadamente, el mexicano es alguien que se sabe mover para no morir de hambre. Sin embargo, este tipo de historias son cosas que desmotivan a cualquiera, en especial a los estudiantes qué tienen la esperanza de poder ejercer su profesión.