La Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris) alertó por la comercialización ilegal de bótox.
Linurase, una toxina botulínica tipo A inyectable, carece de registro sanitario.
Cofepris advierte que la empresa importadora del bótox no ha presentado los científicos que garanticen la seguridad, calidad y eficacia del producto.
Se desconoce además la calidad de sus ingredientes, el proceso de fabricación, transportación, almacenamiento y distribución.
Por lo anterior, Linurase es “un riesgo para la salud“.
Se exhorta a la población a evitar dicha toxina botulínica, así como cualquier otro medicamento que carezca de autorización sanitaria.