La desnutrición aguda entre los niños y las mujeres embarazadas y lactantes en Gaza están aumentando fuertemente y la situación es especialmente grave en el norte, lo que está a punto de provocar una “explosión de muertes”, según han alertado en un comunicado de prensa conjunto la Organización Mundial de la Salud (OMS), el Fondo de la ONU para la Infancia (UNICEF) y el Programa Mundial de Alimentos (PMA).
“La Franja de Gaza está a punto de ser testigo de una explosión de muertes infantiles evitables que agravaría el ya insoportable nivel de mortalidad infantil en Gaza”, ha declarado el director ejecutivo adjunto de Acción Humanitaria y Operaciones de Suministro de UNICEF, Ted Chaiban. Si el conflicto no termina ya, “la nutrición de los niños seguirá cayendo en picado, provocando muertes evitables o problemas de salud”, ha añadido.
Según un nuevo análisis publicado este lunes por el Grupo de Nutrición Mundial, la situación es especialmente difícil en el norte de la franja de Gaza, que lleva semanas sin recibir prácticamente ayuda.
Los exámenes nutricionales realizados en los refugios y centros de salud del norte del enclave palestino revelan que el 15.6 por ciento, o uno de cada seis, niños menores de dos años sufre desnutrición aguda. De ellos, casi el 3 por ciento padece emaciación grave, la forma de desnutrición más peligrosa para la vida, que expone a los niños pequeños al mayor riesgo de complicaciones médicas y muerte a menos que reciban tratamiento urgente.