El gobernador de Florida, el republicano Ron DeSantis, anunció que trabaja con la legislatura del estado para impulsar una ley que prohíba “acampar en calles, aceras y parques” de las ciudades, lo que afectaría directamente a las personas sin hogar, al tiempo que aumentaría el financiamiento para refugios.
“No podemos permitir que ninguna ciudad de Florida se vuelva como San Francisco, donde la falta de vivienda, las drogas y el crimen han diezmado la calidad de vida, perjudicado la economía y erosionado la libertad”, dijo el gobernador DeSantis en una rueda de prensa en Miami Beach.
El gobernador, que el pasado 21 de enero se retiró de las primarias republicanas, manifestó su voluntad de continuar “promulgando políticas que promuevan la responsabilidad y la seguridad de la comunidad”, a diferencia de California, “donde -dijo- están promoviendo políticas peligrosas que dañan a sus comunidades y su economía”.
La propuesta del republicano incluye, además de prohibir acampar en calles, aceras y parques, “aumentar el financiamiento para los refugios para personas sin hogar” y exigir a los ocupantes que “no consuman drogas”.
Incrementaría la medida, además, los fondos destinados al tratamiento del abuso de sustancias y la salud mental, indicó en un comunicado la oficina del gobernador.
El alcalde de la turística Miami Beach, Steven Meiner, dijo que, desde que promulgaron la nueva ordenanza “contra los campamentos públicos” en octubre pasado, “hemos visto a más personas sin hogar utilizar las camas disponibles en los refugios y, por lo tanto, recibir los servicios que necesitan”.
El proyecto de ley, que debe ser aprobado por el Comité de Reglas antes de que pueda pasar al pleno del Senado, también alentaría a personas y empresas a presentar demandas si los gobiernos locales no siguen las reglas establecidas.