El presidente Daniel Noboa decretó el lunes estado de excepción en todo el país, incluidas las cárceles, poco menos de 24 horas después de que su gobierno confirmara la desaparición del capo del crimen organizado Adolfo Macías, alias Fito, de una cárcel de la ciudad de Guayaquil.
En el decreto ejecutivo, el mandatario dispone la participación de las fuerzas armadas ante la “grave conmoción interna” y el ingreso de sus efectivos en los centros penitenciarios “para garantizar que no exista amenaza o afectación grave a la integridad física” de los presos.
El estado de excepción estará vigente por 60 días y es el primero que decreta el presidente Noboa, desde que asumió el cargo hace un mes y medio. En el gobierno anterior fue ampliamente utilizado por el expresidente Guillermo Lasso, que estuvo en el poder hasta finales de noviembre del año pasado.
La decisión llega el mismo día en que la fiscalía procesó a dos guardias penitenciarios involucrados por la presunta fuga del peligroso líder del narcotráfico, detectada momentos antes de que fuera trasladado a una prisión de máxima seguridad, en un caso que le ha valido críticas al gobierno de Ecuador por la falta de control en el sistema penitenciario y la inseguridad en el país.