Estados Unidos reabrirá mañana cuatro cruces fronterizos legales con México debido a que los altos niveles de inmigración ilegal han disminuido y han liberado personal, informaron autoridades fronterizas estadunidenses.
Se reanudarán operaciones en los cruces de Eagle Pass, Texas; San Isidro, en San Diego, California; Lukeville en Arizona, y el puerto de entrada peatonal de Morley en Nogales, Arizona, informó la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP) estadunidense, y añadió que dará prioridad a la seguridad fronteriza según sea necesario.
Las autoridades fronterizas estadunidenses se enfrentaron a dificultades en diciembre para procesar a los migrantes cuando las aprehensiones alcanzaron casi 11 mil en un solo día, cifra que según varios funcionarios alcanzaba un récord.
Autoridades de ambos países se comprometieron la semana pasada a colaborar estrechamente para hacer frente a la migración en la frontera, después de que altos cargos estadunidenses viajaran a México para reunirse con el presidente Andrés Manuel López Obrador.
México ha intensificado la aplicación de la ley de inmigración en las semanas recientes con el traslado de migrantes al sur del país y la reanudación de los vuelos de deportación a Venezuela, aseguró un alto funcionario de Estados Unidos, bajo condición de mantener su nombre en el anonimato, durante una llamada con periodistas el martes.
Las autoridades fronterizas de Estados Unidos detuvieron a un promedio de 6 mil 400 inmigrantes al día durante la semana pasada, según un informe interno del gobierno estadunidense revisado por Reuters, lo que supone un fuerte descenso respecto a los niveles registrados antes de Navidad